En una jornada que parecía definida desde el inicio, Tadej Pogacar enfrentó una inesperada derrota. A pesar de ser el claro favorito para adjudicarse la etapa inaugural y vestirse con la primera tricota rosa del Giro d’Italia 2024, el ciclista esloveno se encontró con un formidable desafío en Jhonatan Narváez. A través de los canales de su equipo, UAE Emirates, Pogacar expresó: “Aunque no gané, al final, estoy satisfecho”.
Una lucha inesperada
Reflexionando sobre los primeros 140 kilómetros de la carrera, Pogacar dijo: “Fue una etapa corta y rápida, intentamos controlarla, pero simplemente no era nuestro día. Aún así, creo que hemos hecho un buen trabajo, considerando que es el primer día de una gran vuelta. Estos días siempre son impredecibles”.
La estrategia de Pogacar
El esloveno lamentó haber tenido que lanzar su ataque en la última subida desde lejos, reconociendo al mismo tiempo la fortaleza de Narváez: “Fue capaz de seguirme. A pesar de que logré distanciar a todos los hombres de la clasificación general, saber que Narváez estaba firmemente a mi rueda complicó las cosas”.
Un duelo hasta el final
Pogacar, quien no se había enfrentado en un sprint a dos desde hace tiempo, admitió haber comenzado su esfuerzo final demasiado pronto, concediendo que Narváez simplemente fue más rápido. A pesar de ser superado también por Maximilian Schachmann, Pogacar se mostró optimista sobre su rendimiento: “No tuve muchas oportunidades, pero puedo estar satisfecho con el esfuerzo”.
Enfocándose en el futuro
A pesar de la decepción inicial, Pogacar ya está mirando hacia adelante, destacando que “cada día irá mejorando”. Subrayó que la etapa del domingo hacia Oropa se adapta más a sus cualidades, aunque la recuperación tras un primer día exhausto será clave.