Una decisión de equipo cambia el destino de Welsford
Sam Welsford se encontraba destinado a competir en el Giro d’Italia hoy, sin embargo, tras un desafortunado desempeño en la Vuelta a Turquía, el equipo BORA-hansgrohe decidió optar por Danny van Poppel como su lead-out. A Welsford se le encomendó entonces liderar en la Vuelta a Hungría, donde no decepcionó, adjudicándose la victoria en la primera etapa.
La carrera: entre la calma y el caos
“El viento nos puso nerviosos en la primera mitad de la carrera”, admite Welsford durante el flashinterview. “Pero no fue lo suficientemente fuerte, resultando en una jornada más relajada, al menos hasta que entramos al circuito local”. La etapa contempló una fuga temprana que el pelotón logró controlar solo en la última vuelta.
Un sprint caótico hacia la victoria
El sprint final estuvo marcado por el caos y una caída significativa. “Afortunadamente, estaba bien posicionado, aunque en el último kilómetro tuve que seguir a otros equipos. Estoy muy feliz por cómo me sentí durante el esfuerzo y, por supuesto, por la victoria. Esperamos poder repetir esto mañana, definitivamente ayudaremos a controlar la etapa”, comentó un entusiasmado Welsford.
El apoyo incondicional del equipo
Shane Archbold, director deportivo del equipo, no escatimó en elogios hacia la fortaleza mental de Welsford. “Fue una etapa perfecta para él. A pesar de que le dolió no competir en la carrera que soñaba, es reconfortante ver cómo cambió de página y logró un sprint perfecto hoy. Esta victoria es un enorme estímulo para la confianza de todo nuestro equipo”.