Olav Kooij, el ciclista neerlandés del equipo Visma | Lease a Bike, consiguió un retador sexto lugar en la primera llegada masiva del Giro d’Italia. A pesar de sentirse fuerte durante la carrera, Kooij enfrentó dificultades en el último kilómetro que le impidieron mejorar su posición.
«Una etapa de constantes altibajos», afirma Kooij
«Fue una etapa tranquila inicialmente, pero todo cambió con el sprint intermedio. De repente, el pelotón se dividió en dos», compartió Kooij en una entrevista para Eurosport. El ciclista destacó la estrategia y el esfuerzo del equipo durante esta fase crítica de la carrera. «Realmente no hablé mucho con los otros sprinters; era cuestión de pedalear fuerte. Era esperable que eventualmente nos alcanzaran», agregó.
La difícil preparación para el sprint final
La batalla por posicionarse en los últimos kilómetros fue especialmente caótica debido al ataque de Tadej Pogacar, lo que desordenó aún más la preparación para el sprint final. «Intenté avanzar por la izquierda, pero no había espacio. Luego traté por la derecha, y ahí fue cuando perdí toda mi velocidad», describió Kooij sobre los momentos decisivos antes de cruzar la meta.
Optimismo tras los contratiempos
A pesar de los desafíos, Kooij se mostró satisfecho, especialmente considerando su caída el día anterior. «No fue un día perfecto, pero no experimenté muchos problemas. Espero que en los próximos días todo vuelva a la normalidad», concluyó con optimismo.
Expectativas para las próximas etapas
La resiliente actuación de Olav Kooij en esta etapa del Giro d’Italia deja entrever su potencial y determinación para los desafíos venideros. Su capacidad para superar adversidades y mantenerse competitivo asegura una emocionante participación en las próximas etapas de la competencia.