Una victoria impresionante en la «Clásica del Infierno»
El domingo fue testigo de la destacada actuación de Mathieu van der Poel en París-Roubaix, donde logró un triunfo solitario, consiguiendo su segunda victoria consecutiva en esta emblemática carrera. Su padre, Adrie van der Poel, manifestó su orgullo ante las cámaras tras la competencia, admitiendo haber seguido la carrera con intensidad.
La estrategia detrás del éxito
Adrie van der Poel compartió su perspectiva sobre la táctica de su hijo, indicando que el inicio temprano de Mathieu y su prolongado solo hacia Roubaix fue bien calculado. Comparó la carrera de la semana anterior, donde Mathieu atacó a los 45 kilómetros, con esta, donde lo hizo a 60 kilómetros, destacando la importancia de un fuerte trabajo en equipo para el éxito.
El fuerte rendimiento de Alpecin-Deceuninck
Adrie elogió la actuación del equipo Alpecin-Deceuninck, destacando el compromiso y la habilidad de ajustarse a las condiciones del recorrido y a la forma de los ciclistas, algo que, según él, ha sido clave en estas últimas semanas antes de la carrera.
La preparación de Van der Poel para los grandes desafíos
A pesar de no participar en el Tour de Francia el año anterior, Van der Poel demostró que puede alcanzar su mejor forma para competiciones importantes como París-Roubaix, ilustrando su capacidad para adaptar su preparación y llegar en condiciones óptimas.
Próximos objetivos: Amstel Gold Race y Lieja-Bastoña-Lieja
Con dos Monumentos ya en su haber este año, Mattieu van der Poel no da por terminada su temporada de primavera. Aunque se espera que participe en la Amstel Gold Race y Lieja-Bastoña-Lieja, su padre sugiere que las expectativas del exterior son altas, reconociendo las diferencia en los campos de participantes y las exigencias de estas carreras en comparación con sus triunfos anteriores.
El camino a seguir
Mientras Van der Poel busca aprovechar su actual estado de forma y la moral elevada, es consciente de los desafíos que enfrentará contra otros competidores igualmente motivados. El rendimiento en Lieja será particularmente revelador, pero independientemente del resultado, estas carreras serán cruciales para preparar las estrategias de las futuras competiciones.