Lotte Kopecky, la campeona del mundo de SD Worx-Protime, se alzó con una victoria histórica tras ganar el sprint de un grupo de seis en el París-Roubaix Femmes, superando a competidoras de la talla de Elisa Balsamo y Marianne Vos. «Este era el objetivo de la temporada«, enfatizó Kopecky, convirtiéndose en la primera belga en ganar el París-Roubaix en la categoría femenina.
Confianza y Estrategia: Claves del Éxito
“Lograr esto es realmente hermoso«, comentó la campeona mundial durante la entrevista posterior a la carrera. “La confianza que el equipo me ha dado durante toda la temporada, pero especialmente esta semana, intentaron hacerme sonreír. Creyeron realmente en mi capacidad para ganar y realizaron un trabajo increíble durante la carrera». En particular, destacó el papel de Lorena Wiebes, quien quedó en el segundo grupo, lo que Kopecky consideró clave para su victoria.
La Estrategia Final
En los momentos cruciales de la carrera, un grupo de seis, compuesto por Kopecky, Balsamo, Vos, Pfeiffer Georgi, Ellen van Dijk y Amber Kraak, se despegó del pelotón. La presencia de Wiebes en el grupo perseguidor permitió a Kopecky reservar energías para el sprint final. «El sprint siempre es nervioso. Estás ahí con dos grandes sprinters, Vos y Balsamo, así que nunca estás seguro», explicó Kopecky. «Hubo un momento en que pensé que estaba atrapada, así que tuve que empezar a sprintar temprano. Y, afortunadamente, pude mantener el sprint hasta el final».
Un momento para la historia
Esta victoria no solo marca un hito personal para Lotte Kopecky sino que también inscribe su nombre en la historia del ciclismo femenino, siendo la primera belga en conquistar el afamado París-Roubaix Femmes. Un triunfo que resalta la fortaleza, estrategia y espíritu de equipo que define su carrera.