Un tributo con polémica
Durante la tercera etapa de la Giro d’Italia, el líder de la clasificación, Tadej Pogacar, llamó la atención con una elección poco convencional de ropa. El corredor del equipo UAE Emirates cruzó la línea de meta en Fossano vistiendo una pausa broek, en lugar del tradicional conjunto. Este gesto fue un homenaje hacia los jugadores del Torino FC, quienes perdieron la vida en un accidente aéreo en 1949. La elección del color morado hacía referencia a los icónicos uniformes granates del equipo.
La intervención de la UCI
Sin embargo, este acto simbólico no fue bien recibido por la Unión Ciclista Internacional (UCI), quienes lo consideraron una infracción a las normativas de uniformidad. Funcionarios de la UCI, no contentos con la inusual combinación de colores del líder esloveno, hicieron una llamada al equipo UAE Emirates la noche del lunes, advirtiendo que Pogacar podría ser desclasificado si repetía el uso de la pausa broek en futuras etapas.
Un regreso a la normalidad… y luego todo en rosa
Atendiendo a las advertencias, Pogacar abandonó la polémica indumentaria durante la cuarta etapa, celebrada el martes, optando por una combinación más tradicional de broek zwart y camiseta rosa. Esta adaptación, no obstante, fue breve, ya que el corredor sorprendió nuevamente al aparecer completamente ataviado en rosa en la etapa siguiente, cumpliendo así con el espíritu y el color característico del líder de la Giro d’Italia.
Un mensaje más allá del ciclismo
La elección inicial de Pogacar de rendir tributo al Torino FC con su vestuario no solo destacó por su singularidad, sino también por cómo el deporte puede ser usado como plataforma para honrar y recordar a aquellos que nos han dejado, incluso en circunstancias que trascienden las disciplinas deportivas.