La nueva meta: Madone d’Utelle
Debido a las adversas condiciones meteorológicas, la organización de París-Niza ha decidido acortar considerablemente la etapa reina, designando como nueva llegada la cumbre Madone d’Utelle. Esta modificación plantea un nuevo desafío para los ciclistas, incluido uno de los grandes favoritos, el campeón belga Remco Evenepoel.
Expectativas de Evenepoel ante el nuevo recorrido
Contrario a lo que muchos podrían esperar, Evenepoel no anticipa que el nuevo recorrido incite más ataques entre los competidores. “No creo que haya más intentos de ataque”, afirmó Evenepoel en una entrevista con Sporza. Para el belga, el desafío principal está en “sobrevivir” y sufrir lo menos posible las inclemencias del tiempo, algo que considera será bastante difícil. Aunque los segundos de bonificación están bien posicionados en el recorrido, Evenepoel no planea esforzarse específicamente por ellos, a menos que surja la oportunidad.
El clima: el mayor desafío
Al ser consultado sobre si el mal tiempo le preocupa, Evenepoel señaló que el único aspecto negativo es que “no será una carrera hacia el sol”. Este factor afecta por igual a todos los competidores, y aunque muchos preferirían condiciones más secas y cálidas, el belga señala que, al no tener que participar en clásicas a continuación, tiene la ventaja de poder recuperarse en calma. Sin embargo, admite que para otros el riesgo de enfermarse es mayor.
Visión sobre la final
Evenepoel califica la fase final de la carrera como “tricky” debido a la presencia de mucho viento en contra y la dificultad del terreno. El enfoque estará en cómo se sienten las piernas y el estado físico general. “No es necesario que forcemos la marcha”, concluye, sugiriendo que la estrategia jugará un papel crucial.