El regreso de un ex campeón del mundo
El ex campeón del mundo junior Jens Dekker hizo su regreso esta temporada después de años de ausencia debido a problemas de salud. En WielerFlits, cuenta sobre su regreso al campo. «Espero encontrar mi lugar detrás del grupo de corredores que luchan por la victoria», dijo Dekker.
Desafíos en la carrera de ciclocross
La carrera de ciclocross de Dekker ha sido tumultuosa. En categoría junior, destacó con su título mundial en Heusden-Zolder en 2016. Sin embargo, problemas respiratorios lo llevaron a competir con limitaciones. Finalmente, se vio obligado a poner fin a su carrera. «Fue difícil explicarlo. En realidad, nunca fue una decisión concreta de retirarme, simplemente ya no podía más. Así que para mí, cuando pude volver a competir, fue lógico intentarlo de nuevo. Pero implementar esos cambios, por supuesto, fue otro paso. Lo pensé un poco, pero rápidamente decidí que quería intentarlo. Quería saber hasta dónde podía llegar», explicó Dekker.
Superando los obstáculos físicos
Para poder regresar, los problemas físicos debían haber sido resueltos, y así fue. «Ya no me afecta seriamente. Sin embargo, sigue siendo algo en lo que debo trabajar. Cada vez que hago algo nuevo, comienzan a surgir. Siento un poco, pero afortunadamente ahora puedo controlarlo. Pero creo que nunca desaparecerá por completo», afirmó Dekker.
Preparación y resultados prometedores
Desde su regreso, los resultados de Dekker han sido prometedores. En su primera competición, logró un tercer puesto, y posteriormente obtuvo dos victorias. A pesar de ser en España y contra un campo menos competitivo, Dekker venció al campeón español Felipe Orts. «Esta temporada ha demostrado ser muy fuerte. A su vez, en la carrera en Heerderstrand, fui segundo detrás de Niels Vandeputte, quien ha estado haciendo un buen papel últimamente. Mis resultados son alentadores», afirmó Dekker.
Obstáculos y objetivos futuros
Sin embargo, en la Copa del Mundo en Maasmechelen, Dekker sufrió una caída que resultó en la fractura de su radio. «Fue realmente decepcionante. Finalmente tuve la oportunidad de competir con los grandes», lamentó Dekker. Después de tres semanas en escayola, solo pudo entrenar en interiores con rodillos. «Fue una experiencia agotadora. Incluso llegué a entrenar 25 horas en una semana. Mentalmente, fue muy duro», confesó.
Metas y enfoque a futuro
A pesar de las dificultades, Dekker sigue enfocado en sus objetivos. «Me gustaría poder unirme al segundo grupo. No el que compite por la victoria, sino el que está justo detrás. Ese es mi enfoque. No quiero centrarme en competiciones específicas como el Campeonato Nacional o el Mundial. Primero debo terminar entre los 16 primeros en la Copa del Mundo, eso es lo que buscaré. Después veremos qué otros desafíos se presentan», concluyó Dekker.