La Flecha Valona del año 2024 quedará grabada en la historia por las terribles condiciones climáticas que afligieron al pelotón. La combinación de frío y lluvia resultó en una verdadera prueba de resistencia para los ciclistas, según comparte el experto en productos Alvin Nordell de Castelli.
Una Batalla Contra el Clima
El evento estuvo caracterizado por una mezcla letal de frío, lluvia y viento, haciendo que solo 44 de los 174 competidores cruzaran la línea de meta. Muchos retirados sufrían de hipotermia, lo que planteó serias preguntas sobre la efectividad del equipamiento moderno contra semejantes adversidades climáticas.
La Perspectiva de Castelli
Alvin Nordell, quien trabaja de cerca con equipos profesionales en Castelli, atribuye los retos enfrentados por los ciclistas a la combinación de frío y humedad. Según él, «Uno puede vestirse adecuadamente para el frío, pero una vez que estás mojado, es demasiado tarde».
Claves para Combatir el Frío y la Lluvia
La estrategia, según Nordell, consiste en anticiparse a la lluvia. Destacó el caso de Ilan van Wilder, quien utilizó un abrigo completamente impermeable, junto con guantes y cubrebotas a prueba de agua. La clave está en mantenerse cálido y seco, preparándose para la lluvia antes de su llegada.
Importancia de la Preparación Adecuada
La preparación juega un papel crucial, ya que mantener una temperatura corporal óptima y evitar la humedad requiere tanto buena ropa interior como una capa externa repelente al agua. Incluso los pantalones de ciclismo modernos ofrecen casi completa impermeabilidad si se usan a tiempo.
Nordell concluye que aunque es posible recalentar el cuerpo después de estar mojado, es una tarea difícil. Esto es especialmente cierto para los profesionales, quienes a pesar de generar mucho calor debido a su esfuerzo, encuentran desafiantes las condiciones cambiantes y el clima impredecible que caracterizó esta edición de la Flecha Valona.