Oier Lazkano ha logrado una vez más la victoria, esta vez en la Clásica Jaén. El campeón español formó parte de la fuga temprana, se escapó en el tramo final junto a Nicolas Prodhomme y continuó en solitario en el último tramo de gravilla. Lazkano luego se alzó con la victoria de manera brillante. Bastien Tronchon quedó en segundo lugar, y Jan Tratnik tercero.
La Clásica Jaén: un recorrido desafiante
La Clásica Jaén se ha incluido en el calendario desde 2022, ganando reputación como una carrera exigente con tramos de gravilla. Este año, sin embargo, el recorrido contenía menos caminos de grava que en ediciones anteriores. Las fuertes lluvias inundaron parcialmente la ruta, por lo que los organizadores decidieron acortarla considerablemente, eliminando casi 40 kilómetros de tramos de gravilla para garantizar la seguridad de los ciclistas. Los corredores recorrieron solo 158 kilómetros, con alrededor de 2,100 metros de altitud y «solo» cuatro tramos de gravilla, que sumaban un total de 17.8 kilómetros de terreno no pavimentado, todos ubicados en los últimos 60 kilómetros.
Una fuga poderosa con Wellens, Turner y Tratnik
En cuanto a los favoritos, Wout van Aert se perfilaba como el claro candidato, pero el belga debía considerar también a ciclistas destacados como Sepp Kuss, Michal Kwiatkowski, Tim Wellens, Juan Ayuso e Iván García Cortina.
De quince a solo cinco líderes en la carrera
La colaboración en el grupo escapado estaba lejos de ser óptima, lo que permitió a Arrieta, Lazkano, Cepeda, Prodhomme y Molenaar acelerar. Estos cinco ciclistas lograron rápidamente una sólida ventaja, mientras que los demás atacantes fueron atrapados uno por uno por el pelotón. En esta situación, el equipo Visma | Lease a Bike tomó el control del pelotón, pero permitió que la ventaja de los cinco líderes se ampliara a cinco minutos antes de reducirla nuevamente en el primer tramo de gravilla.
Lazkano demuestra su superioridad
En medio de la lluvia y la confusión, Lazkano, Arrieta y Prodhomme permanecieron al frente, con una ventaja de casi cuatro minutos a 45 kilómetros del final. Lazkano era claramente el hombre más fuerte del grupo, asumiendo la mayor parte del trabajo. Mientras tanto, Arrieta se estaba quedando rezagado, y en una pendiente corta el joven español finalmente cedió.
Lazkano se va en solitario, Van Aert luchando en la persecución
Mientras tanto, Van Aert perdía terreno en la persecución debido a un problema mecánico, y su equipo no pudo acortar la brecha con los dos líderes. Lazkano y Prodhomme seguían mostrando su resistencia, mientras que los favoritos intentaban alcanzarlos.
Lazkano mantiene la ventaja y se lleva la victoria
Lazkano logró dejar atrás a Prodhomme antes de la última sección de gravilla, manteniendo su ventaja en la recta final y cruzando la meta victorioso, con una ventaja segura sobre el grupo de perseguidores.